Capitán sustituto de los Alas Rojas, usuario de la magia tenebrosa y un temible adversario. Golbez, ya de primeras, gana mucho con su apariencia. Pese a que hemos visto otros tios-armadura en la saga (Se me vienen a la cabeza Garland y Exdeath), Golbez impone más que ningún otro.
Golbez es el tipo de villano que gusta. Un tipo que aparece intermitentemente en la historia, demostrando su superioridad frente a los protagonistas.
Tal vez no me pareció demasiado atractivo que al final resultase ser controlado por Zemus (El cual empieza a ser nombrado demasiado tarde, haciendo que no le temamos demasiado). Me hubiese atraido más una corrupción, algo que le hiciese volverse un caballero oscuro. Así, además, sería la total contrapartida de Cecil.
Cuando Golbez deja de ser controlado y se convierte en el hermano de nuestro protagonista, no pierde el carisma que siempre nos consigue transmitir. Incluso hay un flashback en el que podemos ver a un joven Goblez fuera de la armadura, de buen corazón e ideas. La suma de todo esto consiguió crear un personaje icónico.
TOP 4:
Ni siquiera es la villana definitiva de Final Fantasy VIII, pero Edea consiguió ganarse un lugar en mi corazón hace muchos años.
Al contrario que Artemisa, Edea posee un pasado, posee un trasfondo. Sabemos que Edea es malévola porque Artemisa le está utilizando, ya que hace muchos años aceptó el poder de una moribunda bruja para que sus chicas del orfanato no tuviesen que pasar por ello.
Además de mostrar un lado oscuro mucho más intimidante que cualquier otro villano de su juego, Edea actúa al mismo tiempo como cacique dictador, utilizando al presidente Delling para su propio beneficio e incluso asentándose en el "Jardín" de Galbadia y utilizando este como su propia fortaleza militar, con un centenar de soldados bajo sus órdenes.
Curioso que un personaje de estas características resulte ser, en realidad, una mujer bondadosa y buena. Una madre para muchos niños abandonados.
TOP 3:
Todos los villanos de la saga Final Fantasy comparten, en mayor o menor medida, una cosa: Son tíos "badass", personajes serios y oscuros con sus diferentes motivaciones.
Kefka fue la contrapartida a todo eso.
Un tipo que, simplemente, disfruta sembrando el caos. Un arlequín sacado del mismo infierno, vestido con colores llamativos y, de echo, no muy poderoso (Hasta más tarde). Kefka es, sin duda, uno de los villanos más originales y carismáticos de toda la saga.
Artífice de preciosidades como la muerte de todo el reino de Doma (Así como de la familia de Cyan), asesino del general Leo (General a las órdenes de Gesthal. Un tipo justo y bueno, alguien a quien cojemos mucho cariño). E incluso la destrucción y desolación de todo el planeta, convirtiéndose a si mismo en un Dios y sometiendo a la humanidad, haciendo que incluso nuestros héroes protagonistas perdieran toda esperanza y se rendieran a la grandeza de Kefka Palazzo.
Extrañé, tal vez, saber un poco más de su pasado. Saber si siempre fué así o si hubo una transformación y en el caso de haberle, a que se debió.
TOP 2:
Ya lo insinué en mi entrada de crítica a Final Fantasy IX y es que, más que un hombre con poderes mágicos ultra desarrollados o fuerza bruta aplastante, en mi opinión personal, los mejores antagonistas para esta clase de videojuegos son esos no muy poderosos pero altamente influyentes. Gente que podría destrozarte con sus palabras, con sus recursos. Villanos terriblemente inteligentes, con contactos y poder. Políticos.
Rufus Shinra demostró ser más despiadado que el propio Sephiroth.
Mientras que Sephiroth quería convertirse en un ente de poder ancestral, el joven hijo del difunto Presidente de Shin-Ra tan solo ansiaba llenarse los bolsillos.
Frío hasta en la hora de su muete, Rufus engañaba, robaba e incluso asesinaba a su propio pueblo. Al contrario que su padre, a Rufus no le temblaba la mano a la hora de despreciar e insultar a sus propios altos mandatarios (Heidigger, Escarlata...).
Parece tenerlo siempre todo bajo control, incluso en los peores momentos. Un auténtico mafioso que controla el mundo desde su despacho, lugar donde, de hecho, acabó muriendo debido a su propio orgullo y convencimiento de poder vencer a, ni más ni menos, que Arma.
TOP 1:
Kuja tan solo era un niño. Un Genómido furioso que usaba reinos enteros como sus juguetes y a todo un planeta como su área de juego.
Elegido para ser un recoletor de almas desde su nacimiento, el destino de Kuja siempre había sido causar estragos en el planeta vecino a Terra, Gaya. A pesar de su increíble poder mágico, Kuja utilizó su intelecto para hacer que los habitantes de Gaya se matasen entre ellos, siendo él el marionetista tras el telón y quien, por supuesto, salía beneficiado con toda la guerra.
Durante todo el juego podemos observar como Kuja es un ser extremadamente inteligente, manipulador y carismático, siendo capaz de engañar a la Reina de Alexandría, a los Magos Negros e incluso a su propio creador, Garland.
La realidad tras este antagonista es el miedo a la muerte. El miedo a dejar de existir. Orgulloso de sus propios logros llegó a perder la noción de la realidad y se vió a si mismo como a un auténtico Dios. Pero aquel sentimiento desaparecería ante la advertencia de su creador, Garland: No eres más que otro muñeco y pronto dejarás de moverte.
Desde ese momento Kuja se convierte en otro. En un ser destructivo, rabioso y, por tanto, temible, que tan solo quiere acabar con cualquier vestigio de vida posible. Si no hay vida, no hay miedo a morir, eso es lo que nuestro simpático y demente amigo pensaba.
Una lástima que justo al final, cuando su vida se apagaba, comenzara a comprender como son las cosas...
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